Mercado con una gran trayectoria histórica, en el siglo XVI el espacio ya albergaba puestos al aire libre y a finales de XIX se construyo el edificio, en los inicios del siglo XX se convirtió en el mercado más importante de Madrid. Nada tiene que ver el edificio actual con el primero que se construyó, que tuvo que ser derribado en 1956 por problemas higiénicos. La decoración actual de la fachada y las seis cubiertas abovedadas fueron decoradas por Boa Mistura.
Actualmente sigue teniendo la función de mercado y alberga fruterías, pescaderías, carnicerías... y algún que otro bar para que los comerciantes y compradores hagan un descanso. En la pescadería Mar del Cantábrico hierven marisco y se puede tomar ahí, los sabados la bebida es gratis (cerveza y refrescos). La panadería cercana al afilador vende pan, palmeras, cerveza, sangria... y cercano al Mar Cantábrico está La Parrilla de la Cebada que vende hamburguesas, entrecot...
Si compras en el mercado tienes una hora gratis de parking.
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